La Vicaría Episcopal para la Pastoral es la encargada de la atención pastoral en la Arquidiócesis, organismo que representa al Arzobispo y cuyo Vicario es designado precisamente por él. El Vicario de Pastoral promueve y coordina la acción pastoral del conjunto de la Arquidiócesis y promueve, además, la formación de los agentes pastorales, su activa participación y efectiva integración en la comunión eclesial.

Las tareas particulares del Vicario de Pastoral son: la organización y conducción de las reuniones del Consejo Arquidiocesano de Pastoral que preside el Arzobispo. Asimismo, se encarga de la coordinación y promoción de las actividades de las Delegaciones Episcopales para la Evangelización, la Familia y la Vida, la Esperanza Joven, la Educación y la Cultura, el Desarrollo Humano Integral y la Misericordia.

Vela por la implementación de las Orientaciones Pastorales de la Arquidiócesis entregadas por el Arzobispo y la formación de los agentes de pastoral. También, dentro de sus funciones está la coordinación de la acción pastoral del laicado, entre ellos los Movimientos, Asociaciones y Nuevas Comunidades, el acompañamiento a las comunidades cristianas y el diálogo ecuménico e interreligioso.

Mons. Álvaro Chordi Miranda

Juan Carlos Astudillo

En el centro de la fe cristiana está la persona de Jesucristo. Él nos dice “Yo soy el camino, la verdad y la vida” (Jn 14,6). Antes de enviar a sus discípulos, ellos compartieron con Él sus labores cotidianas y habitaron en su casa (Mc 3,14; Jn 1,38s). Eso fue para ellos una escuela de vida que los formó para el servicio y la entrega.

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